Mantras para sanar el alma
Un mantra es por definición energía mística, encerrada en una estructura de sonido. Es una combinación de sílabas sagradas que al ser repetidas consciente y reiteradas veces producen un efecto en nuestra vibración y energía espiritual. Según las antiguas escrituras de la India, los mantras, surgen del Parma Akasha, el éter primordial, la esencia del universo, y fueron los antiguos rishis los que percibieron, registraron y canalizaron esta sabiduría y la tradujeron en una serie de palabras audibles con cierto ritmo, melodía que en sí misma encarna conciencia y transforma la frecuencia vibratoria de aquel que la repite.
Mantra en sanscrito significa “el pensamiento que protege y libera”. Si bien esta es una definición intelectual que nos permite acercarnos a comprender la complejidad de esta tradición, al mantra se le conoce en la práctica, en la experiencia. Es una comunicación que se produce a nivel álmico y que nos sintoniza con el poder de energías más elevadas y al hacerlo se produce un estado de calma y paz en la mente y en el cuerpo. Repetir un mantra constantemente y poner toda nuestra atención en ello aquieta la mente del movimiento continuo de pensamientos e ideas al que se está acostumbrado. Focaliza la atención a una sola actividad y debido a la alta vibración de las silabas que se entonan, logramos abrir las puertas del espacio interior y nutrirnos de esa energía divina.
Existen algunas maneras de escoger un mantra. Se recomienda escuchar varios de ellos, cantarlos y seleccionar aquel que resuene mejor con la vibración del corazón. Una vez seleccionado se aconseja quedarse con el mismo mantra hasta que se haya vivenciado la influencia de su poder internamente. Siempre podrás utilizar otros para fines específicos pero el mantra personal es único, es al que recurres en todo momento, el que guía tu meditación diaria, el que te ayuda a establecer buenos cimientos en el camino espiritual.
¿Cómo recitarlos?
Para recitar los mantras no necesitamos montar una ceremonia solemne. De hecho, usarlos como instrumento de relajación y meditación es bastante fácil. El simple hecho de repetirlo (en voz alta o en la mente), en cualquier momento que lo necesites, lo hace efectivo. Puedes estar en el autobús, en una reunión de trabajo o mientras caminas, en cualquier situación donde necesites despejar la mente de las preocupaciones, de los problemas o de los pensamientos negativos, o bien también para invocar la solución a alguna problemática.
Ejercicio para comenzar
• Siéntate en un lugar donde no seas interrumpido por al menos media hora.
• Escoge el mantra de tu preferencia o empieza con un Om.
• Identifica la intención de la meditación y el uso del mantra.
Sigue los siguientes pasos para meditar:
• Concéntrate en tu respiración por 5 minutos, siguiendo el ritmo natural del cuerpo.
• Luego, empieza a vocalizar el mantra, tomando aire lentamente y pronunciando el sonido al exhalar, prolongándolo lo que más puedas. No lo fuerces. Repite a tu propio ritmo, intentando no dejar momentos de silencio entre un mantra y el siguiente.
• Sigue el ritmo natural de tu respiración sin quedar sin aliento. Cuando sientas que la transición es natural y sin esfuerzo, ve bajando la voz hasta que el canto del mantra sea interno.
• Deja que el canto interno vaya bajando de volumen también hasta encontrarse con el silencio.
• Y disfruta de este silencio por el tiempo que desees, tú decides cuando parar.
Efectos fisiológicos
Con la repetición de los diferentes mantras el poder irá manifestándose más y más, los obstáculos mentales y físicos empezarán a desvanecerse paulatinamente, ya que los mantras vigorizan la mente y producen nueva energía.
Beneficios que producen en nuestro cuerpo:
• Alivian el estrés y la ansiedad
• Ayudan a la concentración
• Estimulan la creatividad
• Mejoran la visión (física, mental y espiritual)
• Los hemisferios cerebrales se equilibran
• Alivian la sinusitis y de los dolores de cabeza
• Estimulan la actividad de las ondas alfa o meditación profunda
• Equilibran y limpian nuestros chakras y aura
• Facilitan el acceso a la intuición y a nuestra conciencia superior.
En ceremonias hindúes y budistas, muchas veces se trabaja con malas que son accesorios similares a un rosario, que tienen 108 bolitas (algunas veces 21) para recitar este número de veces el mantra escogido.
Chakra Corona - Espiritualidad
Chakra Tercer Ojo - Sabiduría
Chakra Garganta - Comunicación
Chakra Corazón - Amor
Chakra Plexo Solar - Confianza
Chakra Sacro - Aceptación
Chakra Raíz - Estabilidad