Textiles y colores de primavera

Siguiendo la tendencia de estos últimos años, donde lo natural y ecológico han tomado protagonismo, esta primavera veremos los hogares llenos de tonos crudos, maderas en sus distintos acabados, y muchas plantas.

La paleta cromática se tiñe de naturaleza, tanto en la gama de colores que se inspiran en la tierra como con verdes y azules que nos remiten al mar y la selva.

Dentro de los textiles, el lino es el rey, aportando frescura y luminosidad a nuestros ambientes. Desde las fundas de los sillones de la sala, cojines, manteles, cortinas, cubrecamas, el lino es un básico que por su naturalidad se integra a cualquier espacio.

Los estampados también siguen en boga, sobretodo el geométrico que viene con fuerza como tendencia de decoración primaveral, pero con dibujos simples, para generar armonía.

Los detalles y objetos decorativos rústicos y artesanales, ya sean de barro, arcilla, microcemento, cemento u hormigón pulido aportan encanto y originalidad con superficies de texturas imperfectas, sin pulir, que nos remiten a la naturaleza y nos traen la belleza de lo simple a nuestro entorno.

Las fibras como el sisal, yute, ratán, mimbre, coco, entre otras, no pueden faltar esta primavera, tanto en objetos decorativos (lámparas, jarrones, etc.) como en alfombras y muebles (sillas, bancos, pufs, detalles en cannage).

Sin importar el estilo de decoración, las plantas lo llenan todo con su frescura y aroma. Existen tantas variedades de flores y plantas que son fácilmente adaptables a cualquier estilo y ambiente, aportando no solo múltiples beneficios estéticos, también psicológicos, que las convierten en un elemento imbatible para decorar nuestro hogar.