Movimiento #AntiPopotes
El uso de los popotes es algo cotidiano en nuestra vida diaria, pero ¿somos conscientes del impacto ambiental que provocan?
Si eres de esas personas que los empleas frecuentemente, en toda tu vida habrás usado aproximadamente 38 mil. A nivel mundial se utilizan 500 millones cada día. De acuerdo con cifras del Foro Económico Mundial en el 2050 habrá más plástico que peces en el mar.
La campaña mundial #AntiPopotes que busca crear consciencia y reducir la contaminación tuvo su origen en Estados Unidos. Esta acción global fue iniciada por un niño de 9 años, Milo Cress, y propone que cada restaurante pregunte a sus clientes si quieren un popote con sus bebidas en lugar de incluirlo en automático. De esta forma se quiere eliminar poco a poco la generación absurda de basura de un elemento de plástico que no puede reciclarse. Un popote tarda hasta más de 100 años en degradarse, convirtiéndose en un agente contaminante por los químicos que libera de su composición.
En México este movimiento está cobrando fuerza en redes sociales a través de agrupaciones como el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) que promueve en Facebook y Twitter la campaña “Di no al popote”. En Playa del Carmen la Dirección de Ecología también promoverá la eliminación de su uso, con la intención que el sector restaurantero y hotelero se sumen a esta iniciativa en pro del medio ambiente.
El uso innecesario de este producto pone en riesgo la vida de los animales, como aves y tortugas, que tienden a comérselos al confundirlos con alimento. Cifras brindadas por Ocean Conservancy, indican que es posible encontrar 17 mil popotes en apenas 3 horas, en una sola limpieza de playas, en los 17 Estados costeros, incluyendo Quintana Roo.
Gracias a la aceptación y al impacto que tiene este movimiento, se ha adoptado en otros países del mundo.
¿Y tú que crees? ¿Es necesario ocuparlos en nuestro día a día?
#AntiPopotes En México el 95% de los popotes no son reciclables y tardan 100 años en degradarse. Piensa diferente.