Juan Iesari

Nacido en Buenos Aires, Argentina, desde muy pequeño a Juan le apasionaba dibujar y atesorar historietas que conseguía en la calle Corrientes o que su padre le traía del trabajo. Se la pasaba creando historias y personajes para luego dibujar historietas junto con su hermano mayor. “Dibujo desde muy chico, desde que tengo memoria y mis deseos en las tortas de cumpleaños, al soplar las velitas eran: “Quiero ser el mejor dibujante del mundo”. Hacía dibujos con lápices, marcadores, lápices de colores. Ya de adolescente tomé clases de pintura al óleo con un profesor particular y sigo pintando hasta el día de hoy”.

Estudió la licenciatura de Artes Visuales, con orientación pintura, y cursos de Guion y edición de Cine; Animación 2D; entre otras cosas. Alrededor del 2012 y 2013 fueron sus inicios en el mural. “Ya anteriormente, en la pintura al óleo, me llamaban la atención los lienzos de gran tamaño. Desarmaba bastidores que tenía de prácticas, les quitaba la tela y unía de a cuatro marcos para formar un bastidor más grande al cual le preparaba la tela. Pero terminaba siendo muy costoso tanto comprar bastidores grandes como el óleo que gastaba en pintarlos. Por lo que empecé a pintar en paredes para poder hacer obras cada vez más grandes”.

A la hora de pintar murales Iesari suele repetir algunas temáticas que elige y relaciona: el ser humano, los animales y la naturaleza; unidos como un todo en perfecta armonía para poder coexistir. Luego incorpora la anatomía humana haciendo referencia a las similitudes de formas entre la flora, fauna y los órganos humanos. “El sentido es la preservación y cuidado del medio ambiente, ya que sin la naturaleza el ser humano no podría vivir. Muchas veces lo primero que se me ocurre es una forma, una pose de una figura, una posición de elementos. Que luego no termina siendo lo que voy a pintar, pero sí es un disparador que me lleva a ver más imágenes, a investigar sobre el concepto de lo que quiero contar. Trabajo mucho con flora y fauna autóctona, por lo tanto, el buscar los animales o plantas de la región también me ayuda como disparador de ideas. Trato de crear situaciones ambiguas o situaciones que son paradójicas para que el espectador pueda poner su interpretación a lo que está pasando”.

Vive en Playa del Carmen hace casi 4 años porque su esposa es mexicana. “Vine para vivir junto a ella. Como crecí en una gran ciudad, lo que me gusta de aquí es la tranquilidad, los paisajes, el mar y la naturaleza”.

Actualmente, a la hora de crear, Juan prefiere un lienzo, pero por temas de tiempo y trabajo, termina pintando más murales en las paredes. “Busco siempre la manera de comunicar a través de mis obras un pensamiento analítico sobre la sociedad, nuestras costumbres y actos. Con la pintura y el dibujo mi relación es de un amor no humano. Acompañándome tanto en los momentos de alegría como de tristeza. Es un apoyo incondicional que siempre está ahí para poder expresar mis sentimientos. Brindándome satisfacciones indescriptibles y momentos únicos de felicidad”.

Define su estilo como realista, pero a la vez ilustrativo, pues haber incursionado en la historieta y lo gráfico, lo influenciaron. “Las técnicas que uso dependen de lo que mejor se acomode a cada trabajo u obra que quiera realizar. Y las paletas, las tomo prestadas de los colores ya existentes en la naturaleza”.

Tiene varios murales en Playa del Carmen, la mayoría están en negocios, hoteles y casas particulares. Pero en la vía pública se pueden ver por el Parque de la Madre o la colonia Bosque Real, ejidal y Selva Mar. De estados de México, pintó en Puebla, Jalisco, Monterrey, Oaxaca, Atlacomulco. En Argentina tiene murales en varias provincias, luego pintó en Perú, Brasil, Chile, España y Marruecos.

Actualmente está realizando murales por encargo en Playa del Carmen y tiene varios proyectos, tantos que no le alcanzan los días para hacerlos. “Me siento en un momento de mi vida en el cual cuento con cierta madurez mental, experiencia y técnica capaz de hacer grandes obras, lo que necesito es tiempo”.

“Si me preguntas sobre deseos a futuro, voy a tomar solo la palabra deseo como esa esperanza mágica de pedir algo casi irreal e imposible. Como cuando era niño y cerraba los ojos con fuerza pidiendo un deseo al soplar las velitas: Deseo que aparezca un mecenas o sponsor que invierta en mí como artista, para poder pintar estos grandes proyectos personales que tengo en mente”.

Instagram: @juaniesari

“Mi vida como artista es estar en un aprendizaje y cuestionamiento constante. Tener siempre la inquietud de pensar y analizar el mundo en el que vivimos”.

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