¿Has pensado qué es lo que tus sueños están tratando de decirte?

Desde que el ser humano se pregunta sobre sí mismo, uno de los grandes misterios es qué son los sueños. Sabemos que soñar es un acto necesario para nuestra salud así como para conectar nuestra mente consciente con la inconsciente.

En psicología el inconsciente tiene un papel fundamental. Piensa que es el lugar donde se guardan tus deseos, impulsos, creencias, memorias y aspectos reprimidos de tu personalidad, que operan en tu vida de manera oculta y determinan el 95% de las decisiones que tomas. Como resultado, mucho de lo que materializas en tu vida lo haces de forma automática, reproduciendo conductas negativas y generando una sensación de desorientación, neurosis, estrés e incluso enfermedades físicas y trastornos mentales. Entonces, si quieres manifestar una realidad más cercana a lo que deseas, es fundamental que escuches a ese inconsciente que habla en ti, partiendo de la idea que te habla a través de símbolos y su lenguaje es el de los sueños.

A partir de la investigación de Freud sobre los sueños, se desarrollaron metodologías que abordan el tema desde distintas perspectivas, como la psicología individual de Alfred Adler, la Gestalt; y la de Carl Jung que sostiene que los sueños nos ayudan a procesar emociones, sanar heridas y carencias, solucionar problemas y consolidar aprendizajes.

“Los sueños son la manera en la que nuestro inconsciente se comunica con nosotros. Mediante la comprensión de los símbolos e imágenes de los sueños podemos darle sentido no sólo a las experiencias que hemos vivido sino también a nuestros deseos, sueños, expectativas de quiénes podemos llegar a ser, hacia dónde vamos y qué es lo mejor para nosotros. Todo esto y más nos lo comunica nuestro inconsciente a través de los sueños”, explica Damián Orvañanos, psicólogo con 10 años de experiencia en terapia de sueños.

Hay personas que se dedican a explorar el mundo de los sueños, ya sea por diversión o crecimiento personal. Se les llama “onironautas”. Un onironauta tiene el súper poder de “despertar” dentro del sueño (acción que se conoce como soñar lúcido) y hacer cualquier cosa que se le ocurra, como volar, comunicarse con telepatía, conocer a sus ídolos, ir a la punta del Monte Everest, y vivir la vida a su manera con una buena dosis de fantasía.

Mediante los sueños lúcidos podemos acceder a un espacio en el que las limitaciones de la materia no existen y nuestra mente se mueve en absoluta libertad. Conforme se avanza en esta práctica se puede descubrir el potencial de los sueños: conocimiento infinito, el descubrimiento de nuestra verdadera naturaleza y la expansión de nuestra conciencia.

En Playa del Carmen hay un grupo de onironautas que se reúnen para descifrar los sueños, hacer terapia onírica y aprender prácticas para dominar ese otro mundo. Laboratorio Onírico es un proyecto que imparte talleres presenciales y on line, y que está por iniciar su octava edición en enero de 2019, su finalidad es “crear conciencia sobre la importancia de dormir bien y de aprender a comunicarse con el inconsciente para manifestar nuestro poder personal”.

De acuerdo con Damián, quien dirige e imparte el Laboratorio Onírico, una buena práctica onírica y el dominio de los estados del sueño tiene múltiples beneficios para nuestra salud física, mental y emocional; como la desintoxicación y regeneración celular, regulación del sueño y la vigilia, reducción del estrés, la aceleración de los procesos de sanación, aumento de la memoria, eliminación de hábitos negativos y fobias, reprogramación neuronal, regulación del apetito y el peso corporal, por citar tan solo algunos.

Para iniciarse en el trabajo con los sueños, Damián recomienda anotar en un diario todo lo que recordemos de nuestra vida onírica. Esta sencilla actividad facilita el recuerdo y el acceso a la información de nuestro mundo interior. “Existen técnicas que cultivas durante el estado de vigilia, técnicas cuando te estás quedando dormido y otras cuando ya estás dormido. Son fórmulas para decirle a tu observador que reconozca el estado del sueño; por ejemplo, crear un hábito para que durante el sueño nuestra mente consciente diga que está soñando”.

Ahora sí ¡se acabó la mente dormida!

Para más información sobre el Laboratorio Onírico, pueden llamar al:
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