Decoración para los más pequeños
Una buena decoración en habitaciones para niños es parte fundamental del buen crecimiento y desarrollo de los más peques. Un espacio personalizado se convierte en el ambiente perfecto para aprender, jugar y soñar. El objetivo principal es lograr que se familiaricen con su entorno para que se convierta en único. Por eso debes considerar varios puntos primordiales para crear el mejor lugar para tus hijos.
El primer paso es tener en cuenta la edad. Por ejemplo, los bebés necesitan un mobiliario especial para sus necesidades y colores neutros, ya que es una etapa en la que están explorando y conociendo su entorno, por lo que aún no tienen definidos sus gustos.
Cuando hablamos de niños entre 4 y 9 años, encontraremos un amplia variedad de opciones. Lo principal es tomarlos en cuenta al conocer sus intereses y aficiones, ese será nuestro punto de partida. En esta etapa puedes usar colores muy vibrantes como azul, verde, rojo, amarillo, rosa, naranja, etc.
El segundo paso es escoger un tema: si a tu hijo le gustan los deportes o a tu hija le gustan los cuentos de hadas, ese es un buen punto por donde comenzar. No necesariamente tiene que ser un tema definido, ya que la imaginación y el gusto de los niños es tan amplio que cada detalle es importante. Una vez teniendo claro el concepto que queremos desarrollar, podemos basarnos en éste para elegir los colores, creando siempre un armonía. Procura elegir un color brillante y combinarlo con otros que estén en la misma gama de tonos, juega con los acentos de color y con la creatividad. Si tienes un muro azul puedes poner accesorios verdes, se trata de volverlo divertido.
En una habitación infantil no puede faltar un área específica para juegos, ese espacio en donde tus hijos pasarán horas imaginando. Actualmente con tanta tecnología los niños se pierden de hacer otras actividades donde puedan desarrollar su imaginación; pues depende de ti como padre darle un espacio que lo invite a crear y a soñar. Puedes poner pinturas, algún bastidor para pintar, un muro de pizarrón para que tenga toda la libertad de dibujar, una casita de campaña, juegos de mesa, algún instrumento musical, etc.
Es recomendable que el mobiliario que se coloque en la habitación sea personalizado a su tamaño. La idea es inventar un mundo pequeño especial. Es importante tener en cuenta los ángulos de los muebles, de preferencia elegirlos con esquinas redondeadas para evitar golpes graves, dejar un espacio amplio para que puedan ir de un lado a otro sin tropezarse. Respecto a tonalidades puedes optar por madera natural, esta te permite combinar con cualquier otro color o por un tono blanco que también es muy versátil.
La decoración infantil puede ser nuestra aliada para invitar a los peques a realizar ciertas actividades. Por ejemplo, si tu hijo ya está en la escuela puedes destinarle un área especial para realizar las tareas, poniendo alguna mesa con sillas y por qué no hasta un rincón de lectura que lo invite a tener su pequeña biblioteca. Recuerda que ellos absorben todo lo que tú les quieras transmitir, entonces es una excelente oportunidad para crearles buenas hábitos.
La manera más enriquecedora de decorar una habitación para niños es tomándolos en cuenta y permitiéndoles formar parte del proceso. Ya que no sólo estamos dejando su espacio bonito, si no que estamos brindándoles seguridad y confianza, dándoles la libertad de elegir. Sólo así podrán sentirse identificados con su ambiente y pasarán más tiempo en él. Es una excelente manera de conocerlos más y de realizar actividades en familia. Esos detalles hacen la diferencia.