Sabías que...

La “piel de gallina” tiene una función importante en nuestro cuerpo

Todos hemos experimentado la “piel de gallina” o “piel chinita” cuando hemos sentido frío, miedo o nos emocionamos por vivir una experiencia diferente a las comunes. Esta situación se llama piloerección, lo que provoca que los pequeños músculos, los arrector pili, que están en la base de cada capilar se contraigan y levanten cada uno de los pelos o vellos que recubren la piel. Al mismo tiempo, se dilatan levemente los poros, lo que causa esa apariencia tan particular.

Es una respuesta fisiológica del cuerpo que nos protege de los estragos de la exposición al frío, pero que también ayuda a identificar las circunstancias que amenazan nuestra vida. Siendo así, la “piel de gallina” es un mecanismo del cuerpo para defenderse a sí mismo.

Dado que este fenómeno involucra liberación de adrenalina, también estimula acciones defensivas. La piloerección acaba poco después de que la temperatura vuelve a la normalidad o cuando contamos nuevamente con una sensación de seguridad.

La “piel de gallina” tiene entonces una relación estrecha con nuestra integridad más que con la salud, es una manera en la que el cuerpo nos hacer saber que estamos en condiciones hostiles y que tenemos que actuar para preservarnos a nosotros mismos.

Cuánto dura el día y el año en cada planeta del sistema solar

Quizá nunca te hayas preguntado si el día ha durado siempre 24 horas en la Tierra, o si en el resto de los planetas de nuestro sistema solar el día o el año tienen la misma duración que en nuestro planeta.

Todos sabemos que la duración del día terrestre, en la actualidad, es de 24 horas, que es el tiempo que tarda la Tierra en dar una vuelta alrededor de sí misma, aunque, si somos rigurosos, su duración real es de 23 horas, 56 minutos, y 4 segundos.

Esta duración ha variado a lo largo de la historia de la Tierra y ha dependido de la distancia a la que se encontraba su satélite, la Luna; de tal manera, que cada año los días son un poco más largos, aunque este efecto solo es significativo al pasar miles de años.

La Luna recién formada tenía un tamaño 15 veces superior al actual, y se fue alejando de la Tierra. Este hecho ha provocado que el período de rotación de ambos aumente, al disminuir su velocidad de rotación. El día pasó de tener 4 horas a 24 horas en la actualidad.

En el resto de los planetas de nuestro sistema solar la duración que tiene un día es muy diferente. El día más largo tiene lugar en Venus, que dura 243 días terrestres, y el día más corto es el de Júpiter, que dura 0,41 días terrestres (9,92 horas).

En cuanto a la comparación de los años, el más largo tiene lugar en Neptuno, donde dura 164,79 años terrestres, y el más corto es el de Mercurio, que dura 0,24 años terrestres. El resultado nos indica que cuanto mayor es la distancia del planeta al Sol, mayor es el tiempo que tarda en dar una vuelta completa alrededor del Sol; dicho de otra manera, la duración de su año.

Los tiburones tienen un sentido especial llamado electrorrecepción

Los tiburones dependen de sus sentidos para sobrevivir en su hábitat natural. Por lo tanto, la mayoría de sus sentidos son muy eficientes y están muy desarrollados.

Los escualos tienen lo que se conoce como línea lateral. Este es un sentido interno que les permite detectar las vibraciones en el agua. Este es el principal sentido que utilizan para encontrar a sus presas en el agua, así como la ubicación de otros tiburones que pueden estar en la zona.

Todas las criaturas vivientes emiten algún tipo de electricidad al moverse en el agua. Los tiburones pueden detectar fácilmente estos movimientos con las ampollas de Lorenzini, que les permiten sentir la carga eléctrica de la presa en el agua.

Los tiburones detectan los impulsos eléctricos a través de una red de poros situados en su cabeza y hocico, que a su vez conducen a unos canales cubiertos con una sustancia gelatinosa con pequeñas bolsas llenas de células sensibles a la electricidad (células electrorreceptoras). Las denominadas ampollas de Lorenzini pueden recoger los impulsos eléctricos débiles hasta un metro de distancia y enviar la señal al cerebro del tiburón.

Los cazadores activos como el tiburón martillo y los grandes tiburones blancos tienen hasta 1.500 ampollas de Lorenzini, mientras que los menos activos cuentan con tan sólo unos cientos. Los tiburones martillo pueden sentir el corazón latiendo de una raya, incluso si el animal está oculto e inmóvil bajo la arena.

La electrorrecepción también ayuda a algunos tiburones en los momentos finales de un ataque, cuando sus ojos se retrotraen para protegerse.