Mario Zabaleta

Pianista, compositor y docente, Mario Zabaleta ha construido su camino entre escenarios, academias y estudios, movido por una pasión que comenzó en su propia casa. Nació en Cancún, aunque su infancia y juventud transcurrieron en Playa del Carmen, donde vivió hasta los 25 años. Hoy reside en Madrid, ciudad en la que continúa desarrollando su carrera artística y compartiendo su música con nuevas audiencias.
Su primer contacto con el piano fue tan natural como inevitable: su madre, pianista de profesión, abrió la primera academia de música en Playa del Carmen. En ese ambiente lleno de notas, ensayos y alumnos aprendiendo a tocar, Mario creció rodeado de música. No recuerda exactamente cuándo decidió dedicarse profesionalmente a ella, pero desde niño tenía claras sus aspiraciones. “Cuando en la escuela hacían las típicas preguntas de qué querías ser de grande, yo siempre respondía que director de orquesta y Spiderman”, dice con humor.Las primeras clases las tomó en la academia de su madre, Marta de Juana, donde aprendió no solo a tocar el piano, sino también a leer y escribir música, componer e interpretar. Años más tarde sumó la guitarra a su repertorio en Explayarte, y con el tiempo fue especializándose con distintos profesores tanto en México como en España, explorando estilos, géneros y técnicas que alimentaron su universo creativo.
A los 17 años comenzó a dar clases particulares de piano, motivado por la necesidad económica. Pero con el tiempo, enseñar se convirtió en una vocación tan fuerte como la de componer. “Creo que el momento en el que descubrí que enseñar era mi segunda pasión fue cuando logré entender y transmitir con mis palabras y estilo todo lo que yo había aprendido durante años. Conseguí impartir clases que mi yo del pasado hubiera deseado tener”, cuenta.
Su enfoque como docente se basa en el disfrute: busca que sus alumnos aprendan a su ritmo, combinando el rigor del método clásico con una mirada más libre y creativa. “Nunca he dejado de ser alumno. Mientras más aprendes, más te das cuenta de lo poco que sabes”.
Cuando se trata de interpretar, prefiere el repertorio clásico y neo-clásico en solitario, aunque en conjunto disfruta cualquier género, desde el R&B y el soul hasta el pop o el rock. Su imaginario sonoro está marcado por figuras como Yann Tiersen, Sofiane Pamart y Chilly Gonzales, aunque confiesa que la banda sonora de su vida está compuesta, en un 99%, por Gustavo Cerati, Radiohead, Led Zeppelin, Oasis y Soda Stereo.
Compuso su primer tema original a los 16 años. “Ahora que lo pienso, es gracioso, porque ya en ese entonces usaba el mismo método que sigo usando hoy: empezar a improvisar y repetir las frases que me van gustando”. Con el tiempo, fue sumando recursos, ampliando su lenguaje musical y encontrando nuevas soluciones para las melodías o armonías que va descubriendo en el proceso.
La composición es para él una forma de procesar las emociones. “Me guío mucho por el sentimiento que esté atravesando en ese momento, pero conforme pasan los días frente al instrumento, esos sentimientos cambian. A veces una composición empieza siendo por tristeza y termina siendo por melancolía”.
Después de años compartiendo su música solo en vivo, Mario decidió abrir un canal de YouTube, venciendo su natural resistencia a las redes sociales. En ese espacio, que ya tiene dos videos disponibles, comparte un cover de Yann Tiersen y su primer tema original publicado en plataformas: El Jardín Secreto, una pieza que compuso hace diez años y que, según él, marca el cierre de una etapa y el inicio de otra.
“Mi propósito es seguir alimentando el canal con música original y versiones de canciones. Si les gusta el neo-clásico y las bandas sonoras, les va a gustar el proyecto que estoy empezando a construir”.
Ya puedes escucharlo aquí:
YouTube: Cover de Yann Tiersen
YouTube: El Jardín Secreto (Tema original)
“Lo importante de la música es compartir y disfrutar con la gente”.
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