Diana Escárcega Espinosa
Nacida en México DF, Diana creció en el seno de una familia de muchos artistas culturales, muy grande y unida, rodeada de abuelos, tíos, primos, donde en las reuniones siempre incorporaban la música, el baile, y las delicias de la abuelita que eran el corazón de la unión familiar.
Desde pequeña estuvo en contacto con niños pues su mamá y sus dos hermanas son educadoras y siempre asistía a las escuelas en donde trabajaban. “Me encantaba estar con los niños y hacer actividades con ellos, era fabuloso escuchar sus comentarios creativos y poder observar cómo absorbían todo como esponjitas, con una mentalidad y corazón completamente inocentes. Estudié la secundaria en Ontario, Canadá, y a mi regreso fue cuando tomé la decisión de estudiar educación siguiendo la vocación familiar. Recuerdo perfectamente bien mi primer trabajo en donde tuve un grupo maravilloso, inicié este camino de la educación con 18 niños espectaculares que marcaron mi vida para siempre”.
“Luego comencé a dar clases como maestra de inglés en una Comunidad Montessori que cambió mi forma de pensar y de enseñar. Me tomó un buen tiempo poder comprender bien esta filosofía y después de estudiarla extensamente y de observar vivencialmente la manera en que los niños aprendían, me convencí de que este era el mejor método para que puedan aprender de una manera completamente natural, en donde se les enseña respetando el desarrollo natural del ser humano. Y me di cuenta que de esta manera los niños aprendían fácilmente, y encima tenían la curiosidad, ganas, motivación, estaban completamente concentrados en aprender, en su trabajo. Se les enseña responsabilidad y estratégicamente se les pone en situaciones en donde deben de aprender a tomar decisiones adecuadas para su edad y madurez. Durante estos años en el ambiente Montessori me transformé y mi vida cambió, no es una filosofía únicamente educativa, es una filosofía de vida”.
Desde el 2003 tomó la decisión junto con su actual esposo de mudarse a Playa del Carmen por una temporada de 3 meses. “En nuestros veintipocos años de edad queríamos experimentar esta pequeña y hermosa ciudad de la que todos nuestros amigos hablaban. Nos enganchó totalmente y aquí seguimos, jaja! Me encanta estar cerca del mar y poder tener el privilegio de ir los fines de semana. Y ahora que tenemos un hijo pequeño que crezca en este espacio natural, lleno de tanta cultura, apreciando lo sencillo y maravilloso de la vida”.
Actualmente trabaja como Directora General de El Árbol Green School. El Árbol es el resultado del amor, el trabajo duro y la cooperación de una sólida comunidad de padres y educadores que se unen para satisfacer las necesidades de los niños. Si bien es una institución de nueva formación, esta comunidad educativa ha trabajado de la mano durante más de cinco años para proporcionar un entorno educativo internacional donde los niños de todo el mundo puedan aprender sobre diferentes culturas. Desde el principio, su filosofía ha sido ofrecer un concepto educativo alternativo basado en los principios del constructivismo y el aprendizaje basado en proyectos, todo mientras fomentan la independencia, la inclusión y la responsabilidad en sus estudiantes. “Seguimos el Constructivismo, teoría que ve el aprendizaje humano como un proceso en el cual las personas construyen su propia comprensión y conocimiento del mundo a través de experimentar cosas y reflexionar sobre esas experiencias. Al hacer preguntas, explorar y evaluar lo que saben, los estudiantes se convierten en creadores activos de su propio conocimiento.
El Árbol Green School está conformado por una comunidad de niños curiosos, apasionados y reflexivos que se enfoca en enseñar habilidades del mundo real a través de la investigación y el aprendizaje basado en proyectos (Project-Based Learning), alentando a los estudiantes a alcanzar su máximo potencial académico. Buscamos promover las habilidades y actitudes hacia la vida que facilitarán el éxito de nuestros estudiantes en su educación postsecundaria y su vida profesional. Fomentamos cualidades como integridad, valor, empatía y curiosidad en nuestros alumnos, motivándolos a convertirse en ciudadanos globales responsables y reflexivos.
Somos un Colegio verde impartiendo educación para un futuro sustentable. El Árbol Green School es un nuevo concepto en sustentabilidad y diseño. Nuestro campus ofrece espacios abiertos que apoyan la vida sostenible y una relación simbiótica entre nuestros estudiantes y la flora y fauna local.
Un sistema fluvial al aire libre recoge el agua de lluvia que se usa para hacer funcionar los baños y las plantas de agua, y la electricidad se transforma a partir de la energía solar reunida por paneles ubicados en el techo principal. El techo también tiene capacidad para 30 macetas que se pueden utilizar para proporcionar productos frescos para la cafetería del Árbol, así como para un mercado semanal. Son nuestros mismos niños los que aprenden el cuidado de los huertos, desde los pequeños de Kinder 1 (3 años de edad) hasta nuestros chicos grandes de Online (Secundaria)”.
Además ofrecen clases electivas diarias que nutren la mente, el cuerpo y el espíritu, que incluyen arte, danza, ajedrez y educación física. También cuentan con el After School Program para niños de nivel Primaria, de lunes a jueves, de 2:30 a 3:30pm. Los estudiantes pueden participar en actividades extracurriculares que incluyen tutoría en inglés o español, club de baile, taekwondo, arte y manualidades, club de francés, laboratorio de ciencias, fitness class y ayuda con tareas.
“Somos una comunidad internacional de niños, padres y educadores en Playa del Carmen, comprometidos en hacer del mundo un lugar mejor. Nos esforzamos por criar niños que tengan un profundo respeto por las diferentes culturas, el planeta y la comunidad donde viven”.
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