Salud y bienestar
Desde la antigüedad se promovió la salud y el bienestar a partir del lema “mens sana in corpore sano”. La humanidad, en especial en los tiempos modernos, ha adoptado un sinfín de estrategias para sentirse mejor, verse mejor y hacer que nuestra vida sea siempre más cómoda. Deportes de todo tipo, actividades al aire libre en contacto con la naturaleza, retiros desintoxicantes, relajantes, de medicina sagrada y mucho más. A pesar de todos los esfuerzos el resultado no parece ser tan satisfactorio viendo la cantidad de personas que acuden a doctores, psicólogos, psiquiatras, terapeutas de toda clase y nivel, tomando ansiolíticos y otros medicamentos intentando encontrar un equilibrio.
¿Dónde está el problema? El problema surge cuando, como niños o adolescentes, en nuestra vida, pensamientos, palabras y acciones se rigen según el principio del placer y no según el principio de realidad. Esto significa que siempre vamos buscando lo que nos gusta huyendo de lo que nos provoca dolor. Esto tiene mucho sentido pero el problema es que en muchas ocasiones lo que nos gusta ¡también nos hace daño! Entonces, ¿la solución dónde está? Precisamente en la disciplina que, a través del discernimiento y de la consciencia, nos permite tomar la decisión correcta transformándonos en adultos maduros.
¿Cómo desarrollar consciencia? Yoga, en mi opinión y siendo mi camino, es la herramienta de desarrollo del ser humano en su totalidad más completa que el hombre haya creado desde su aparición en este planeta. Grandes maestros afirman que la vida es un juego y el yoga el manual de instrucciones para jugar esta partida, conociendo perfectamente las reglas del juego para así poderle sacar el mayor provecho. No es casual que los grandes rishis (sabios de la India), yoguis, maestros espirituales, advirtiendo sobre los obstáculos de la práctica de yoga, pongan en primer lugar Avidya (ignorancia) definiéndola también como la madre de todos los demás obstáculos, siendo ésta el origen de cualquier equivocación y mal entendimiento.
¿Cómo vamos a escoger el tipo de práctica o estilo de yoga mejor para nosotros? Antes que todo tenemos que estar conscientes de nuestra edad, condición física, actitud para poder elegir entre ofertas diferentes: desde muy demandantes a nivel físico hasta totalmente meditativas. La clave es experimentar una y otra clase, tratando de poner a un lado el juicio para dejarse llevar por la experiencia del momento, confiando en nuestras sensaciones y así dejar la elección a la parte más profunda de nosotros que ¡siempre sabe lo que nos conviene más!
Hay que subrayar la importancia de la práctica de Sakshi, Conciencia Testigo (observarte a ti mismo como si fueras otra persona, sin juzgar), que nos ayuda a evitar muchos errores. Por ejemplo, si comenzamos una dieta basada en consumir una determinada cantidad de calorías, muchas veces tendemos a fallar sin poder controlar la tentación de introducir automáticamente en la boca algún alimento afuera del plan indicado! En este caso, Sakshi podría evitar el error: te das cuenta en el momento presente y aplicando voluntad activas la acción correcta.
Dicho esto, parece muy claro que somos los responsables de nuestras acciones así como de nuestro éxito o fracaso. Aunque este principio no nos guste para nada, ya que la tendencia general es de imputar las responsabilidades hacia afuera, hacia los demás, sean padres, amigos, desconocidos o circunstancias, tomamos el papel de víctima para pensar, aunque sea de forma más o menos inconsciente, que ¡no somos responsables de nuestra propia vida!
Una herramienta extraordinaria para desarrollar consciencia es empezar activando tu Sakshi (observador ecuánime), mientras estás manejando y así darte cuenta de cómo reaccionas cuando, siempre desde tu perspectiva, alguien no respeta las señales, toca la bocina si no te apuras, te roba estacionamiento, etc., etc.
Esperando quede claro que nuestra salud y bienestar depende de nosotros mismos y nadie más, les deseo que la búsqueda de esta condición tan anhelada sea un maravilloso viaje hacia dentro, conscientes que ¡la meta es el mismo viaje!
“Lokha Samastha Sukhino Bhavanthu”
Que todos los seres de todos los mundos estén bien, felices y en paz.
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