“Unisphere” es el increíble edificio cero emisiones de EE.UU.
Es difícil construir un edificio de emisiones cero netas, uno que produzca más energía de la que consume, en medio de una ciudad. Por un lado, los rascacielos cercanos podrían impedir que la luz solar llegue a los paneles solares de la azotea. Por el otro, los edificios de oficinas urbanas tienen poco espacio y, por lo general, no es posible instalar turbinas eólicas en el sitio.
Sin embargo, Martine Rothblatt, directora de United Therapeutics, no cedió al tratarse de la nueva sede de la compañía cuando los diseñadores advirtieron que erigir un edificio neto cero en el centro de Silver Spring, Maryland, sería una tarea formidable. Ella respondió: “No me importa, averígualo”. Y así lo hicieron.
“Ella sintió muy fuertemente que no se puede alcanzar el cero neto como una ocurrencia tardía”, dijo Thomas Kaufman, director de bienes raíces corporativos de la compañía, que desarrolla tratamientos para enfermedades raras. “Tiene que ser un mandato al principio que impulse todas las decisiones”. El resultado, un edificio de 135,000 pies cuadrados conocido como Unisphere, que se inauguró en 2018, y es descrito por la compañía como el edificio comercial cero neto más grande del mundo. Llega mucho más allá de los accesorios habituales, como paneles solares y luces LED. Por el contrario, utiliza una combinación de tecnologías avanzadas que hacen que el edificio sea totalmente sostenible.
La quema de combustibles fósiles para suministrar calor y electricidad a los edificios representa alrededor del 29% de las emisiones de gases de efecto invernadero de los EE.UU., por lo que los responsables de las políticas buscan formas de limpiar hogares y oficinas.
En 2017, por ejemplo, California aprobó el primer código de construcción neto cero en la nación, que exige que toda construcción residencial nueva sea cero energía neta para 2020, y toda construcción comercial nueva para 2030. Alcaldes de ciudades como Portland, San Francisco, y Nueva York, se han comprometido con políticas similares. Unisphere muestra cómo los grandes edificios de oficinas podrían alcanzar este tipo de objetivos ambiciosos.
Optimización de energía
Su sistema involucra miles de dispositivos que alimentan un poderoso “centro nervioso” de computadora que rastrea el uso de energía y coordina el calentamiento, enfriamiento y otras operaciones. Las ventanas se oscurecen automáticamente cuando hace calor afuera y se abren para permitir el flujo de aire fresco. El aire circula a través de un laberinto de concreto de un cuarto de milla de largo, 12 pies debajo del edificio, proporcionando calefacción y refrigeración pasivas; el laberinto tiende a ser más frío que el aire exterior en verano y más cálido en el invierno. Una piscina en el centro del gran atrio del edificio absorbe el exceso de calor y también se puede usar para nadar.
El centro de la operación son 52 pozos de intercambio geográfico perforados 500 pies en la tierra que funcionan como bombas de calor. Las tuberías llenas de agua enterradas extraen calor de la tierra en el invierno para calentar el edificio y luego envían el calor del edificio a la tierra durante el verano para enfriarlo.
“Además, casi todos nuestros espacios ocupados están iluminados significativamente con luz natural”, dijo Jared Loos, arquitecto de EwingCole, quien diseñó el edificio. “En muchos casos, las luces dentro de un espacio se atenuarán o apagarán por completo y permitirán la luz total del día, especialmente en las oficinas perimetrales, creando oficinas llenas de aire exterior 100% fresco y luz 100% natural”. Durante el día, la energía excedente de los numerosos sistemas del edificio, que incluyen cerca de 3,000 paneles solares, se vuelve a vender a la red, mientras que, por la noche, la red vende energía mínima al edificio. En total, el Unisphere vende más poder del que compra.
“Martine declaró que solo vamos a construir los pies cuadrados que podamos soportar con las energías renovables en el sitio, punto”, recordó Loos. “Esa es una mentalidad muy diferente de la que tendría la mayoría de los propietarios al abordar un nuevo proyecto, que comienza con una demanda acumulada de espacio adicional, o una nueva función y necesidad, y luego intenta hacer malabares con el horario, la necesidad y el costo para encontrar el equilibrio adecuado”.
Esto no quiere decir que no haya obstáculos en el camino. Inicialmente, el Condado se negó a otorgar un permiso para los pozos de intercambio geográfico de los edificios, diciendo que las reglas estatales no permitían la colocación de pozos debajo de los edificios. Pero la regulación tenía la intención de legalizar los pozos de agua potable, por lo que requiere inspecciones periódicas de salud. Una vez que los reguladores estatales supieron que el agua en estos pozos no estaba destinada al consumo humano, modificaron la regla y el Condado aprobó el proyecto.
Además de su misión net-zero, la compañía también muestra animaciones en todo el edificio que describen cómo usa la energía. Su pieza central es la rueda de energía, una instalación en el atrio central compuesta por un conjunto circular de luces espejadas de 24 pies de diámetro, que utiliza datos en tiempo real para ilustrar el uso de energía. Cuando sus luces brillan hacia afuera, el edificio está produciendo energía. Cuando brillan hacia adentro, la está usando.
“Convierte información compleja en cosas que los seres humanos pueden ver, sentir y comprender”, dijo David Schwarz, socio creativo de HUSH, la agencia que hizo la rueda de la energía. “Los empleados pasan por ese dial de energía todos los días y saben que están en una relación con el edificio y con su energía”.
El congresista Jamie Raskin, demócrata de Maryland, cuyo distrito incluye Silver Spring, dijo que estaba encantado de que la comunidad que representa sea el hogar de esta presencia de energía verde de vanguardia.
Shanti Pless, ingeniera de investigación sénior en el Laboratorio Nacional de Energía Renovable, estuvo de acuerdo. “El Unisphere y la renovación neta cero de AGU son ejemplos locales de lo que se puede hacer en el área de DC para alcanzar este nivel de desempeño de objetivos de cero energía en un entorno urbano”, dijo.
Los funcionarios de la compañía no hablarán públicamente sobre el costo de crear un edificio neto cero, pero Kaufman dijo que el precio no era mucho más que algunos de los edificios anteriores de la compañía.
“La tecnología está lista para usar”, dijo. “No inventamos nada nuevo. Solo requería la mentalidad para hacerlo realidad”.
Este texto apareció originalmente en Quartz, puedes ver el original en inglés aquí.
Traducido por: Mónica Gálvez – Fuente: Quartz
Fotografía por: EwingCole
Etiquetas: Edición 110