La hamaca, una tradición que perdura a través del tiempo
Los orígenes de la hamaca comenzaron en Centroamérica hace aproximadamente mil años por los mayas. Esta importante civilización no solo creó el calendario más exacto y su propio sistema de escritura, sino que también diseñó una hamaca en forma de banda que se sigue utilizando en la actualidad.
Las primeras hamacas se elaboraban con tejidos de la corteza del árbol de hamac, de allí el origen de su nombre. Más tarde, la planta de Sisal sustituyó a la corteza como material preferido, debido a su abundancia y a que sus fibras eran más suaves al roce del cuerpo.
Hoy en día, su producción, diseños y colorido, la convierten en una atractiva artesanía que conquista a locales y turistas.
Existen diferentes calidades y materiales, las cuales debemos conocer para saber cuál elegir según nuestras necesidades. Las hamacas son hechas 100 % a mano, y su calidad dependerá básicamente del tipo de hilo (calidad y grosor) y de la cantidad que se usa para realizarla.
Hay algunas de hilo de algodón o de nylon. Se recomiendan las de nylon para el exterior y las de algodón para interior. Considerando que este último es una fibra natural, con los cambios de clima su tiempo de vida será más corto, comparada con una de nylon, sobre todo si el clima es como el de Playa del Carmen, será mejor una de nylon.
En ambos materiales existen diferentes grosores de hilo. Cuando se hace una hamaca con hilo grueso, el resultado final da un tejido un poco más abierto. En cambio, cuando el hilo es más delgado su calidad es mayor, es un trabajo mucho más fino y el tejido es mucho más cerrado. Hay algunas de hilo tan delgado, como el de costura, mejor conocidas como hamacas croché, una verdadera obra de arte, son muy suaves y resistentes. Se elaboran solo en tamaño king o jumbo.
Es importante decir que ninguna hamaca es mala, sino que sus diferencias hacen que sean más o menos cómodas al momento de disfrutarlas, ahí notamos las diferentes calidades. La mejor te permitirá dormir en ella, como si estuvieras en una nube; la otra será un rato corto que podrás disfrutarla. Y su durabilidad dependerá siempre del cuidado que se le dé.
En Playa del Carmen te recomendamos mucho visitar Hamacamarte, maravillosa tienda donde el buen gusto, los colores, las manos artesanas, se sienten a flor del piel. Allí podrán orientarte sobre lo que más te conviene de acuerdo a tus necesidades.
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